Emilio Ribes Iñesta nació en la ciudad de Barcelona, España, el 24 de junio de 1944. Naturalizado mexicano, en 1960 ingresó a la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México, contando con sólo 15 años de edad. Aunque la enseñanza de la psicología en esos tiempos estaba caracterizada por una orientación filosófica-especulativa y psicoanalítica, el mar cultural inconmensurable de la facultad, lo puso rápidamente en contacto con modas intelectuales, teorías novedosas, experiencias políticas y con la realidad social del país. La autoritaria atmósfera educativa produjo en él y otros compañeros, el deseo de forjar una escuela universitaria de psicología científica crítica, democrática y vinculada a la solución de los problemas del país.
En 1963 egresó de la primer generación de psicólogos, con una formación de tipo profesional y se vinculó a la orientación vocacional, único tipo de trabajo asequible para el psicólogo en ese tiempo. En 1964, en compañía de Antonio Gago, se transladó a Xalapa para unirse a Víctor Alcaraz, quien se encontraba impartiendo algunos cursos en la Facultad de Pedagogía de la Universidad Veracruzana.
Gracias al apoyo de los rectores de ese entonces, Fernando Salmerón y Fernando García Arana, y en especial de Rafael Velazco Fernández, el grupo creció rápidamente, permitiendo que por vez primera en América Latina, la psicología formara parte de la Facultad de Ciencias. La participación de Emilio Ribes en el diseño curricular de la licenciatura de psicología de la Universidad Veracruzana en Xalapa en 1965, integrando el conocimiento experimental y aplicado, fue decisiva.
Este grupo de psicólogos mexicanos, que en poco tiempo llegó a conocerse como el Grupo Xalapa, convirtió a Xalapa en la Meca del conocimiento psicológico moderno, tratando de recuperar 50 años de diferencia entre el conocimiento existente en la psicología y el que se impartía en México. Contando con recursos caseros como laberintos de madera y cajas de Skinner hechas de madera y cartón, en forma novedosa, vincularon la enseñanza de la licenciatura con la investigación de manera cotidiana. También se ligó el servicio, mediante la operación de la Clínica de la Conducta que formaba parte de la Universidad Veracruzana. La aportación e importancia de Emilio Ribes en esa gestión, actualmente está documentada en múltiples publicaciones.
Al igual que sus compañeros, ante la carencia de una formación metodológica y experimental, Emilio Ribes se impuso una formación autodidáctica misma que generó la necesidad de ponerse en contacto directo con los líderes de la psicología en el extranjero. En consecuencia invitó a O. H. Mowrer, expresidente de la American Psychological Association, quien era uno de los teóricos más destacados del aprendizaje. Con acciones de este tipo, sin formulaciones complicadas, se impulsó la autoformación dinámica y comprometida de los docentes, que se actualizaban mediante la lectura de obras y el contacto académico con las fuentes originales existentes. Estos aspectos resaltados, aunque generados grupalmente en estos jóvenes psicólogos, desde entonces forman parte inseparable de las acciones de Emilio Ribes en la educación superior en México.
Debido a su gestión, en 1967 se realizó el Primer Congreso Mexicano de Psicología y "por primera vez [en México] se reunieron psicólogos de distintas localidades, dedicados a diferentes problemas, con el objeto de comunicar sus experiencias profesionales y el resultado obtenido en el trabajo experimental; así como discutir problemas comunes que afectan el desenvolvimiento científico y profesional de la psicología en México". El impacto de este congreso en la docencia universitaria de la psicología, marcó el inicio de una importante etapa para la actualización de los docentes de la disciplina.
En 1969, gracias a su relación con Fred. S. Keller y Charles B. Ferster, Emilio Ribes introdujo y aplicó los sistemas de instrucción personalizada en la enseñanza superior en el diseño y creación del primer postgrado en Modificacion de Conducta de habla latina, en la Universidad Veracruzana en Xalapa, que incluyó a varios estudiantes nacionales, brasileños y colombianos. En ese mismo año, organizó el Centro de Entrenamiento y Educación Especial (CEEE) de la Facultad de Ciencias de la UV en Xalapa como institución que integró la enseñanza del postgrado con la investigación básica y aplicada del comportamiento humano y con el servicio y aplicación profesional del conocimiento.
Al hacerse cargo del CEEE, produjo su primer libro que constituye un manual de investigación aplicada que ha tenido gran impacto en muchas generaciones de licenciatura y postgrado.
Vinculado posteriormente al Colegio de Psicología de la UNAM, ante el crecimiento incontrolado de escuelas de psicología en México, que carecían de una tradición científica y profesional, en 1971 Emilio Ribes le propuso al Dr. Luis Lara Tapia (quien sería el primer director de la Facultad de Psicología de la UNAM) y a la Mtra. Graciela Rodríguez de Arvizu, profesora de carrera de psicología de la Universidad Iberoamericana, la creación del Consejo Nacional para la Enseñanza e Investigación en Psicología (CNEIP) del cual es miembro cofundador. Como gran parte de las acciones programáticas del CNEIP, delineadas por él mismo, dedicó grandes esfuerzos para la traducción de diversos textos recomendados por la Sociedad Interamericana de Psicología, que ayudaban a la formación actualizada de los miles de estudiantes inscritos en las escuelas de psicología en América Latina, tratando de subsanar la falta de conocimiento y tradición científica.
Su actividad dentro del CNEIP impulsó decididamente la definición del perfil profesional del psicólogo, lo cual redundaría en los curricula de las más de 30 escuelas del país, acreditadas en ese entonces en el CNEIP. Bajo su promoción se efectuaron 3 Talleres Nacionales para el desarrollo curricular de la disciplina (Jurica, San Miguel Regla y Chihuahua). Sin embargo, intereses extra-académicos manifestados principalmente por algunos dirigentes de escuelas privadas y su probada ineficiencia, limitaron los efectos de esta acción cuyos beneficios hubieran ayudado substancialmente a corregir el derrotero de la enseñanza de la psicología en México y a limitar racionalmente la creación de escuelas de psicología que no contaran con los mínimos de calidad establecidos.
Invitado por el Dr. Luis Lara Tapia, se integró al Colegio de Psicología de la UNAM. Con la experiencia anterior, coordinó la formación del Grupo Piloto de la licenciatura en psicología de la UNAM (1971-1973) en el que se integró la enseñanza especializada, dirigida a la investigación y al servicio. Los resultados de esta acción están representados por más de 20 tesis de investigación desarrolladas en ese periodo de dos años. En 1972 ante la proposición del Dr. Lara, diseñó el programa y coordinó el postgrado en Análisis Experimental de la Conducta, logrando reunir a destacados profesores como Víctor Alcaraz, Florente López, Jaime Herman, Jorge Peralta, Arturo Bouzas y Ely Rayek. Excepcionalmente en esos tiempos, logró la contratación de docentes extranjeros como John Scull, Pere Juliá, Tom Lovitt, Tom Garrett y Joao Claudio Todorov (actual rector de la Universidad de Brasilia). Este tipo de acciones a lo largo de su vida, han permitido que un número considerable de estudiantes de licenciatura y postgrado, al tener contacto con investigadores de otros países, prosigan su formación de postgrado en el extranjero. El número de estudiantes que han salido y regresado productivamente al país bajo la promoción de Emilio Ribes, suman varias decenas.
La sólida formación como docente e investigador, conseguida por Emilio Ribes, le permitió ser el organizador de los cursos de formación de profesores de la ANUIES en el campo de la psicología en el periodo de 1973 a 1977. Así, bajo los auspicios de la UNESCO, participó en la realización de la Primera Reunión Latinoamericana para el Entrenamiento Profesional de Psicólogos, efectuada en Bogotá, Colombia. Su presentación enfatizó el diseño curricular en la educación superior a partir de una perspectiva conductual. Este aspecto, lo llevaría a cabo posteriormente en el proyecto curricular de la ENEP-Iztacala, de la UNAM.
Otra importante actividad consistió en la Propuesta de la Universidad Abierta en Psicología en 1973, cuyo modelo actualmente conserva las características esenciales propuestas por Emilio Ribes.
En ese mismo año, diseñó el nuevo plan curricular de la maestría y doctorado de "Análisis Experimental de la Conducta" de la Facultad de Psicología de la UNAM (1973-1975) que constituyó el primer programa tutorial de postgrado, basado en el estudio independiente, estudio de temas selectos y investigación supervisada.
Su reconocida calidad e impacto como docente e investigador lo llevó a realizar el diseño del Plan Básico de licenciatura del CNEIP, mismo que implantó como programa al asesorar la creación de la licenciatura en psicología en la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (1973) y en la Universidad de Guadalajara (1975).
La expansión de la matrícula universitaria de la UNAM, en 1975 produjo la creación de la Escuelas Nacionales de Estudios Profesionales (ENEP) fuera del campus de la Ciudad Universitaria. Fue el momento y oportunidad para que, ante la invitación del Dr. Héctor Fernández Varela, Emilio Ribes efectuara el diseño curricular del plan modular de la licenciatura en psicología de la ENEP-Iztacala, de la que fue el primer Coordinador. Este diseño no tenía parangón con ninguna escuela de psicología del extranjero, además de considerarse una de las tres únicas innovaciones curriculares en la década de los 70, como lo señala Raquel Glazman y Milagros Figueroa. Los documentos relativos a esta experiencia educativa están reunidos en el libro de Ribes, Fernández, Rueda, Talento y López "Enseñanza, ejercicio e investigación de la psicología: Un modelo integral", editado por Trillas en 1980.
La consolidación de la investigación científica en la psicología seguía siendo una preocupación. El modelo de Iztacala podía dar más. Emilio Ribes tradujo esta preocupación al diseñar e implantar el Programa de Formación de Profesores en Ciencias Básicas de la ENEPI (1971). Este programa alterno a la licenciatura, perseguía el objetivo de formar estudiantes selectos en la licenciatura, primordialmente en el campo de la investigación psicológica. De esta manera, mediante acuerdo institucional, al egresar de este programa, los estudiantes se incorporaría directamente a reforzar a la planta docente existente.
Las acciones de Emilio Ribes en el campo de la educación no se limitan al área de la psicología. Más tarde, siendo Coordinador General de Investigación de la ENEP-Iztacala, diseñó e implantó el programa de investigación para el perfeccionamiento docente incluyendo además de la psicología a todas las licenciaturas existentes en ese campus: biología, enfermería, medicina y odontología.
La planta docente de la carrera de psicología en Iztacala estaba formada en su mayoría por psicólogos recién egresados de diversas universidades. Gracias a la oportuna planeación educativa efectuada por Emilio Ribes, desde los primeros años de vida de la institución, algunos profesores cursaron sus estudios de postgrado en el extranjero. Los resultados de esta acción le permitieron, nuevamente, diseñar el curriculum para la fundación de dos nuevos programas de postgrado: "Modificacion de Conducta" y "Metodología de la Teoría e Investigación Conductual" (1981-1982) en la ENEP-Iztacala.
Obtenido el grado de maestría en la Universidad de Toronto desde 1967, y siendo Investigador Nacional del Nivel III en el Sistema Nacional de Investigadores del CONACYT, atento a las deficiencias filosóficas y teóricas del modelo conductista de B. F. Skinner, se inscribió en el doctorado ofrecido por la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM. En 1994, Emilio Ribes recibió el grado de Doctor en Filosofía con Mención Honorífica, en la facultad que lo vio nacer.
La investigación desarrollada por Emilio Ribes no sólo abarca los aspectos filosóficos, teóricos y experimentales básicos, sino que también se ha preocupado por los aspectos relacionados a los campos de aplicación como es la educación para la salud, la educación especial, los modelos para la enseñanza de la ciencia y la educación misma. En esta última área, la obra de Emilio Ribes es sumamente importante ya que muchos de los planteamientos que él ha hecho en reuniones académicas y publicaciones, los ha llevado a cabo en la educación superior. Su preocupación por la educación se extiende a los niveles de educación básica y media básica en los que ha auspiciado y dirigido la realización de investigaciones diagnósticas relacionadas a la formación del comportamiento inteligente en estudiantes normales. Actualmente, está promoviendo la fundación de una escuela que bajo su diseño, auspicie el desarrollo de este tipo de comportamiento inteligente, basando el interés del docente en el aprendizaje del estudiante. Este sistema puede revolucionar la calidad y eficacia de la educación básica ya que, a diferencia de algunos otros, está teóricamente fundamentado de manera sólida y lo respalda gran cantidad de investigación básica, dirigida por él mismo.
La constante preocupación de Emilio Ribes por elevar los niveles de formación de los docentes y profesionales, que redunde a su vez en la docencia universitaria, impulsó la fundación del Colegio Nacional de Psicólogos en 1989. Con este sentido, desde hace tres años participa activamente en el Comité par la Práctica Internacional de la Psicología promovido por la SEP.
Su reconocida actividad docente, de investigación y difusión de la ciencia, lo ha llevado a participar por invitación de manera continua como miembro de Comités de Beca y del Programa de Fortalecimiento del Posgrado del CONACYT, como ponente en reuniones de tecnología educativa, planeación educativa, evaluación y revisión curricular y como participante en órganos colegiados universitarios.
Su última creación curricular en el postgrado, se inscribe en la Universidad de Guadalajara a la que pertenece desde 1991. El postgrado "Ciencia del Comportamiento", fundado en 1994, es un programa totalmente tutorial, basado en la investigación, dirigido a la formación de investigadores del área. El programa pertenece al Padrón de Excelencia de CONACYT, situación que es nacionalmente extraordinaria, si se considera que se trata de una institución universitaria ubicada fuera del centro del país. Este programa de postgrado, ha recibido la visita de más de 30 investigadores nacionales y extranjeros en sólo 4 años de existencia.
A lo largo de más de tres décadas, las aciones que Emilio Ribes ha desarrollado ininterrumpidamente, se han caracterizado por un elemento esencial, en tanto se hable de importancia e impacto de una persona sobre la educación: profesar cátedra como Profesor-Investigador desde 1964 hasta la fecha en la licenciatura y en el postgrado, y como profesor visitante de numerosas universidades mexicanas y del extranjero en América y Europa.
En la actualidad, la presencia de Emilio Ribes en la educación superior se caracteriza por: a) la formación de muchas generaciones de estudiantes de licenciatura y postgrado, quienes han recibido un ejemplo a seguir en el campo científico y académico; b) el diseño e implantación curricular de programas de licenciatura que propicien una formación del estudiante que integra la formación académica, el servicio y la investigación; c) el diseño e implantación curricular de programas de postgrado (maestría y doctorado) dirigidos a la formación de investigadores; d) el ejercicio eficaz y eficiente de la planeación educativa dirigida a formar profesores de alto nivel; e) propiciar la actualización de estudiantes y profesores, mediante el contacto directo con los líderes de la psicología experimental mundial; f) la fundación, promoción y mantenimiento de revistas científicas que difundan los trabajos de profesores investigadores mexicanos y extranjeros, motivando así que el profesor vincule o siga vinculando la docencia y la investigación; g) el logro de importantes financiamientos para la adquisición de acervos bibliográficos y equipo de investigación dirigido a las licenciaturas y postgrados en los que ha participado, generalmente como autor intelectual, profesor y director.
Su dedicación al estudio sistemático de los problemas de la educación superior está documentado, al igual que sus aportaciones significativas al conocimiento y superación de tales problemas. Su profundo interés y dedicación como profesor e investigador para contribuir al desarrollo de la educación superior, se observa en la prolífica actividad publicada respecto al desarrollo e implantación curricular en la licenciatura y postgrado en psicología.
Emilio Ribes se erige actualmente como uno de los líderes de la psicología experimental, no sólo en nuestro país sino internacionalmente, como lo hacen constar los premios que ha recibido y las invitaciones para realizar conferencias y talleres. La autoformación lograda, la alta cantidad y calidad de investigación realizada, y su continuo desempeño como profesor le permitió en 1985 formular un modelo teórico del comportamiento, debido a su labor esencialmente universitaria, que vincula los aspectos relativos a la docencia, la investigación y la difusión científica.
En los Estados Unidos, durante la primeras 3 décadas de este siglo, la referencia a los trabajos de Edward G. Thorndike en el campo educativo, era imprescindible. Hablar del diseño curricular, de la enseñanza y de la investigación en psicología en la educación superior en México, a partir de los 60, obliga a citar directa o indirectamente la obra de Emilio Ribes, se esté o no de acuerdo con sus planteamientos.
Actualmente, la enseñanza de la psicología, al igual que la enseñanza de todas las disciplinas, sigue padeciendo muchos problemas, pero el atraso de 50 años ha sido indudablemente superado. A todas luces, éste es un impacto sustancial. La presencia de Emilio Ribes en la educación superior ha permitido que la docencia, ejercicio e investigación de la psicología en México, pueda competir y contribuir dignamente en el campo internacional.
El 30 de abril de 1987, con motivo de la premiación de Emilio Ribes por parte de la Sociedad Mexicana de Psicología, el Dr. Luis Lara Tapia escribió en relación a su obra: "no se puede ser profundamente científico sin ser profundamente humano y generoso, lo mismo que generador de sueños académicos. Solamente un gran constructor es capaz de tales obras universitarias que hoy nos parecen monumentales".
el ya murio?
ResponderBorrarNo. Todavía no. Está en Xalapa, en la UV
ResponderBorrarFavor de informar la fuente de la información, gracias!
ResponderBorrarBravísimo Emilio, le conocí en un simposio sobre Modificación de Conducta en Caracas Venezuela en 1978. Siempre le he seguido su curriculum. Germán de la Riva. España
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